«Memorias de una servidora», de la autoría de la Licda. Iluminada González, prologada por la Mag. Arelys Ricourt, la cual manifiesta que dicha obra, “es una recopilación meticulosa de las acciones y avances en materia de género en el Poder Judicial desde el 2000 hasta 2024. A través de sus páginas, la autora nos guía por un recorrido histórico que abarca desde los primeros pasos dados en la inclusión de la perspectiva de género hasta la consolidación de políticas y programas que hoy son un referente en la región. La obra destaca no solo los logros institucionales, sino también las historias personales de quienes han sido parte de este proceso, muchas de las cuales ya no están físicamente con nosotros, pero cuyo legado perdura”.
Memorias de una servidora, es un libro que explora el contexto nacional e internacional en el que se desarrolló la política de igualdad de género del Poder Judicial Dominicano. Además, presenta de manera concreta las acciones emprendidas por el Poder Judicial desde el año 2000 hasta el 2024 en materia de género.
La primera Comisión dirigida por la Magistrada Eglys Margarita Esmurdoc, la segunda por la Magistrada Dulce Rodriguez de Goris, la tercera por la Magistrada Martha Olga García Santamaría, la cuarta por la Magistrada Esther Agelan Casasnovas y la quinta por la Magistrada Nancy Salcedo.
Destaca la importancia de cada una de las Comisiones para la Igualdad de Género que, a lo largo de los años, han establecido las directrices para implementar esta política, sus características distintivas y las fortalezas que han asegurado la sostenibilidad de los procesos en favor de los derechos humanos de las mujeres, la igualdad de oportunidades y el acceso a la justicia.
En dicha obra se resalta la integración del enfoque de género como principio rector, junto con las iniciativas educativas de la Escuela Nacional de la Judicatura, -que se desarrollan de manera sistemática y transversal-, y las medidas analíticas del observatorio de justicia y género, (especialmente a través de investigaciones y actualizaciones de jurisprudencia nacional e internacional), han fortalecido el cambio cultural necesario para avanzar en igualdad de género y desmontar estereotipos que obstaculizan el desarrollo de la mujer.